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La tecnología avanza vertiginosamente. Hoy es parte de nuestra vida y para muchos resulta extraño no estar conectados. Tanto así, que imaginar una vida sin Internet es imposible. Esta fuerte tendencia, no solo ha influenciado la vida de las personas sino que también está calando fuerte en el mundo profesional.
Decir que el avance de la tecnología modela la demanda de profesiones, es un hecho. En 1999 ser Analista de Seguridad Informática era impensado, con suerte alguien sabía de qué se trababa, pero hoy, existen alrededor de 80.000 profesionales en Estados Unidos.
Temas de automatización, biotecnología y tecnología aplicada, están revolucionando áreas de la economía nacional tan importantes como la minería. Por ejemplo, el Big Data, el internet de las cosas, el almacenaje cloud, la robótica, la biotecnología, ente otros, están marcando la pauta sobre qué tipo y qué competencias deben tener los nuevos profesionales del sector minero.
Entre 2010 y 2020 la demanda de trabajadores relacionados con la tecnología aumentaría en un 22% a nivel global, según el informe de proyección de empleo elaborado por la BSL en 2014. Cabe destacar que este porcentaje supera a los demás sectores, los que aproximadamente mostrarían un alza de 14,3%.
Las universidades han tomado este requerimiento y entienden que deben potenciar la formación de nuevos profesionales. Jóvenes con competencias blandas más elevadas, conocimientos tecnológicos específicos y aplicados y por supuesto, un buen manejo del inglés.
El objetivo: aportar a la minería chilena una visión más contemporánea y reactiva ante la irrupción estas tecnologías, profundizando además en las oportunidades que ello produce al empleo, lo que se traduce en más puestos laborales, un alza en la productividad y, por ende, más ingresos para dicho sector.
Un ejemplo de esto tiene relación con el Big Data, esta tecnología por sí sola ha generado en algunas partes del mundo opciones laborales altamente demandadas, es así como Data Scientist, o científico de datos, Arquitecto de información, Periodista de datos, Ingeniero de Data Mining, entre otros, se encuentran en una espiral ascendente tanto en proyecciones laborales como en renta líquida.
Es así, como lo que hoy se requiere de un profesional es que reúna capacidades tanto de análisis profundo con herramientas de correlación como entendimiento de las variables relevantes para el negocio. Pero, ¿qué pasa con Chile?
Según, el estudio realizado por Fundación Chile, “Fuerza laboral en la gran minería chilena 2012-2020”, se espera una demanda de profesionales superior a los 38.000 puestos, en un país que cuenta con un déficit de 15.000 profesionales TIC. Pese a ello, el tema se está debatiendo y tanto universidades como privados se encuentran definiendo sus líneas de acción ante esta problemática.
Hoy contamos con jóvenes digitalizados, pero no es suficiente. Siempre se debate sobre la productividad del sector y cómo potenciarla, bueno, contar con nueva mano de obra, una más especializada y sumar nuevas tecnologías a los procesos, sin duda, elevará la productividad y las ganancias de la minería nacional.
Finalmente, lo anterior se puede reforzar teniendo presente que se estima que solo en temas de Cloud Computing este año se generarán unos 14 millones de empleos a nivel mundial. Como país, ¿seremos parte de esta revolución educacional-profesional? Espero que sí, pues el debate ya está instalado y todo parece decir, vayamos por ello.
Ricardo Rivera, Gerente de Desarrollo de Negocios COASIN Mining Solutions.
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