Una intensa fiscalización realizó la Superintendencia de Servicios Sanitarios de O´Higgins en varios puntos de la región (SISS). Así fue como profesionales visitaron instalaciones de grifos y fuentes de agua potable superficiales de manera de cumplir con la normativa vigente respecto a la calidad del vital elemento, así como también la operatividad de los grifos en caso de emergencia.
En la comuna de Peralillo se monitorearon 23 grifos, los que corresponden a una muestra representativa de la totalidad existente en la localidad, detectando sólo inconvenientes menores. “Todos los grifos que se encuentran en la vía pública y que fueron fiscalizados están disponibles para el eventual uso de Bomberos. Las observaciones que realizamos fueron menores, como por ejemplo señalética, pintura y otros detalles que ya fueron notificados a la empresa sanitaria con el fin de que sean solucionados a la brevedad” indicó Jaime Ramírez, fiscalizador oficina Rancagua.
En cuanto a fuentes superficiales, se inspeccionó las que corresponden al área Rancagua-Machalí, comprobando su seguridad, funcionamiento y lo más importante que el agua que de ahí se capta y trata cumpla con la Norma Chilena de calidad de agua potable. “No se encontraron anomalías en las captaciones. La que se encuentra en el río Cachapoal tiene una buena mantención, al igual que la del Río Claro. Ambas están en perfectas condiciones” explicó Patricio Bustos, Jefe de Oficina Rancagua, quien además agregó que próximamente se continuará fiscalizando el resto de las fuentes de agua potable de la región de O’Higgins, de acuerdo al programa anual de la Superintendencia, que permite asegurar la calidad del servicio en la región
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