Con mucha alegría, la comunidad de Cunaco recibió su nueva capilla, luego de que su antigua iglesia resultara con gravísimos daños producto del terremoto de febrero de 2010.El Obispo de Rancagua, Monseñor Alejandro Goic, bendijo este viernes 6 de mayo a las 19:00 hrs. la nueva capilla de este pueblo, que reemplazará a la parroquia San José, la cual resultó con serios daños con el último terremoto y deberá ser demolida. Esta capilla se construyó en el marco de la campaña “Capillas de Emergencia: Reconstruyamos Chile con Cristo” que lleva adelante la Fundación Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS) para apoyar a las comunidades católicas del país que perdieron sus templos.
El párroco, Padre Fernando Miqueles, señaló que “para la comunidad éste es un momento muy importante porque hemos pasado más de un año celebrando Misa en el patio frente a la iglesia destruida o en la escuela. Ahora volvemos a tener un lugar que es parte de la vida de la comunidad. La gente decía con gratitud: tenemos un lugar donde reunirnos tranquilos, es nuestra casa. Contar con esta capilla ha sido una gran ayuda y estamos muy agradecidos”.
A la ceremonia asistió el Gerente General de la Fundación Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS), Gabriel García, quien señaló que con esta capilla ya son 43 las capillas de emergencia entregadas por esta fundación en diferentes localidades de las regiones VI, VII, VIII y Metropolitana, cuyos templos fueron gravemente afectados por el terremoto. Gabriel García señaló: “Inmediatamente después de la tragedia de febrero de 2010 nos pusimos al servicio de la Iglesia con esta campaña de construcción de capillas de emergencia. Ahora hemos comenzado un nuevo desafío: reconstruir algunas de las iglesias destruidas para entregar a las comunidades damnificadas un lugar donde encontrarse con Dios y su comunidad”.
Campaña “Capillas de Emergencia: Reconstruyamos Chile con Cristo”:
El proyecto de Capillas de Emergencia de la Fundación Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS) fue desarrollado por el arquitecto y consejero de AIS, Gonzalo Mardones, y fue inspirado en el manto de la Santísima Virgen María que acoge en el a todos los fieles. Cada capilla consta de una estructura de fierro con cubierta vinílica, resistente al agua, con una superficie de 185 metros cuadrados y capacidad para 100 personas sentadas.
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