De acuerdo a los antecedentes expuestos en la audiencia, la fiscalía formalizó por cuatro hechos ocurridos entre noviembre de 2009 y días posteriores al terremoto de febrero de 2010. En todas las ocasiones, el adulto aprovechándose de la cercanía con la niña y las relaciones de confianza con los demás integrantes de la familia, accedió a la menor cuando ambos quedaban solos, en algunas ocasiones en el domicilio de la abuela ubicado en San Francisco de Mostazal y con posterioridad al terremoto, en la mediagua que le fue asignada a la familia.
Los hechos fueron develados por la niña a las profesoras del colegio donde asiste, en el contexto de una taller de expresión oral, lo que luego fue denunciado por las educadoras. A partir de la denuncia, la fiscalía logró reunir los antecedentes a objeto de solicitar la detención del imputado, lo que cumplido por la Brigada de Delitos Sexuales de la PDI.
La Fiscal Carolina Suazo destacó el rol de las profesoras en la denuncia que permitió detener los abusos sexuales del tío respecto de la victima, y que pese al daño sufrido, la niña pudo aportar antecedentes que permitieron situar la ocurrencia de los hechos.
El juez de Graneros, Marcelo Albornoz, acogió la solicitud de la Fiscalía y decretó la medida cautelar de prisión preventiva respecto del imputado, fijando un plazo de 60 días para el cierre de la investigación.
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