Una bebé prematura de 26 semanas y 895 gramos de peso proveniente de Pichilemu logró salvar con vida gracias a las atenciones y coordinaciones realizadas por los funcionarios de la recién creada Unidad de Cuidados Intermedios de Neonatología del Hospital Santa Cruz.
El hecho comenzó cuando la madre de la bebé, Carla Meza, dio a luz en su domicilio ubicado en el principal balneario de la región siendo asistida por su madre en una primera instancia y luego por funcionarios del recinto asistencial de Pichilemu, lugar donde se toma la decisión de trasladar con urgencia a la recién nacida al Hospital Santa Cruz.
“Pensé que mi hija se iba a morir por lo anticipado del parto y por el poco peso que presentaba. Estoy muy agradecida de los funcionarios del hospital por todo lo que hicieron por mi hija desde el momento que llegó a este recinto. Ahora verla que está bien nos da mucha alegría como familia ya que creemos que todo esto fue un milagro de Dios”, señaló la madre.
El jefe de Pediatría del hospital, Dr. Javier Villablanca, comentó que desde hace un mes se formó la Unidad de Cuidados Intermedios de Neonatología la “cual nos ha permitido una mejor resolución de los bebés prematuros ya que son muy monitorizados por la implementación entregada por el Ministerio de Salud (Minsal) y el Servicio de Salud de la región como incubadoras de intensivo, monitores multiparámetros, bombas de infusión y personal humano que nos ha permitido tener una matrona estable al cuidado de los niños más delicados las 24 horas al día”.
Respecto al caso del bebé de Pichilemu el doctor acotó que “ella llegó con un gran apremio respiratorio, muy cansada y con un peso de 895 gramos por lo que procedimos a intubar para administrarle presión y oxígeno que ella requería para poder vivir y le instalamos un catéter venoso para administrarle los fluidos y drogas que les correspondían. Se estabilizó con lo anterior la función respiratoria, metabólica y cardiovascular, hechos que fueron muy importantes para salvarle la vida”.
El profesional puntualizó que luego de estabilizar a la recién nacida, ésta fue derivada al Hospital Luis Tisné en Santiago lugar donde permaneció tres semanas para luego volver al Hospital Santa Cruz. En el recinto asistencial de Colchagua en la actualidad se encuentra “muy bien neurológicamente, con requerimientos de oxígenos bajos y con evolución muy adecuada”, dijo Villablanca.
El director del Hospital Santa Cruz, Dr. Ricardo Silva, señaló que para el recinto de salud es prioritario seguir creciendo en complejidad por lo que una unidad de intermedios neonatal es muy importante y “denota un esfuerzo de todo el equipo que comanda el doctor Villablanca, labores que ya dan frutos como fue el caso en el que se salvó la vida a una bebé con pocas semanas de vida y de poco peso, lo que es un hecho notable”.
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