Así fue indicado el Intendente Wladimir Román en la comuna del secano, quien inauguró dos importantes obras: un centro comunitario y una Estación Médico Rural en Peñablanca. Además, compartió con trabajadores en los tijerales de las casas Muro del programa de viviendas patrimoniales.Con una inversión de 49 millones de pesos, financiados a través del Fondo Nacional de Desarrollo Regional, FNDR, el Gobierno de O’Higgins dio vida al sueño de más de 260 vecinos de Pumanque, que esperaban desde el terremoto del 27F, contar con su sede comunitaria para el mejor funcionamiento de la Cooperativa de Agua Potable, que fundaron en 1969 con apenas 37 personas.
Para inaugurarla oficialmente, llegó hasta Pumanque el Intendente Wladimir Román, quien junto al alcalde Francisco Castro, y al presidente de la Cooperativa de Agua Potable, Jesús Romero, efectuaron el tradicional corte de cinta, entregando el recinto al uso no sólo para la cooperativa, sino para unas aproximadamente mil personas que también tendrán acceso a las amplias dependencias construidas por el Gobierno, que abarcan 172 mts2, en albañilería reforzada.
“La nueva sede, que fue construida en un terreno cedido en comodato a la municipalidad por nuestra Cooperativa por 20 años, consta de dos oficinas, un amplio auditorio, bodegas y servicios higiénicos, pero lo más importante, es que será un lugar de encuentro, de actividad física y de terapia para nuestros socios y también vecinos, quienes en su gran mayoría son personas de la tercera edad. Por ello no puedo dejar de agradecer a las autoridades por este apoyo que nosotros valoramos, porque acá le sacaremos mucho provecho a nuestra nueva sede”, dijo el presidente de la cooperativa.
Por su parte, la máxima autoridad regional señaló que “esta obra es un ejemplo de la decisión que ha tomado el gobierno central de descentralizar los recursos, y de brindar una real oportunidad a las regiones de administrar sus recursos, de contar con más dineros y así poder priorizar más obras como ésta en el Consejo Regional, entregando bienes que implican un avance para los vecinos y que potencian a las comunas”.
Estación Médico Rural de Peñablanca abrió sus puertas
Pero esta obra no fue la única inaugurada hoy por el Intendente Román, ya que también dio el vamos a la estación Médico Rural de Peñablanca, en Pumanque, donde la Subdere invirtió 34 millones 500 mil pesos, y el municipio aportó otros 4 millones 675 mil pesos.
En la ocasión, el alcalde Francisco Castro valoró “el aporte del Gobierno para ambas obras, especialmente para los vecinos de la localidad de Peñablanca, donde funcionaba una estación médico rural que atendía a la población del sector y cercana, como Camarico, Cerrillos, Rincón La Mina, entre otras, pero que era muy antigua, y el terremoto la inutilizó. Pero gracias a los recursos que el Gobierno del Presidente Piñera destina para las regiones, estamos reponiendo esta estación médica que tanto bien y servicios entrega a nuestra comunidad”.
“La obra, emplazada en 72 mts.2, cuenta con box para atención médica y de enfermería, baños públicos y para funcionarios de salud, sala de espera, entre otros, viene a reforzar la atención médica que es nuestra prioridad, especialmente en zonas alejadas como Peñablanca, donde las familias requerían trasladarse varios kilómetros hasta el centro de Pumanque para recibir la atención necesaria, así que estamos muy satisfechos con esta obra que contó con el apoyo de la Subdere”, señaló el director del Servicio de Salud O’Higgins, doctor Cristian Gabella.
Tijerales en Casas Patrimoniales
Las actividades en Pumanque continuaron frente a las casas patrimoniales que el Minvu reconstruye, donde la empresa a cargo de la obra y el municipio ofrecieron los tradicionales tijerales para los trabajadores de la obra, quienes acompañados por las autoridades y vecinos, festejaron el avance en la construcción de las Casas Muro, que consisten en una propuesta para la reconstrucción de Pumanque, que busca ser sensible al patrimonio donde se inserta, sin perder su condición de diseño contemporáneo, tanto en sus definiciones técnico-constructivas como en el mejoramiento de las condiciones de habitabilidad de los espacios interiores.
En los tijerales, donde también participaron el Seremi de Vivienda, Jorge Silva, y el director regional del Serviu, Raimundo Agliatti, se destacaron las características de este tipo de construcciones, donde su primer elemento reconocible es un muro rotundo que separa el interior privado del espacio público, reconstruyendo aquella característica primordial de la arquitectura tradicional como es la definición de un frente continuo entre casas diferentes, compartiendo entre ellas una misma línea de fachada.
Este muro está construido en base a un elemento tipológico y repetible, en albañilería de ladrillo fiscal reforzada con pilares y vigas de hormigón armado, y auto-arriostrado por su forma de “corchete” en planta.
Detrás de este muro se desarrolla una planta básica de 50m2 interiores, con los recintos exigidos por el estándar SERVIU (dos dormitorios, un baño y un espacio de estar-comedor-cocina).
Cada casa cuenta también con un corredor cubierto, que respeta las dimensiones generales del corredor tradicional que seguirá existiendo en aquellas casas que se restauren, formando un corredor continuo donde habrá tramos originales y tramos nuevos. La reutilización de pilares recuperados permitirá, también, otorgar una unidad estética al corredor, que en este sentido se constituye como el elemento unificador entre las nuevas viviendas y aquellas antiguas restauradas.
Sobre el quehacer en obras patrimoniales, el seremi de Vivienda, Jorge Silva, dijo que “a partir del terremoto del 27 de febrero, en el que muchas residencias de valor patrimonial de nuestro país se vieron afectadas, el Ministerio de Vivienda y Urbanismo diseñó un Plan de Reconstrucción que consideró no sólo buscar una solución definitiva para que las familias perjudicadas recuperen su casa, sino que además, mantener características y valores tradicionales en las construcciones que otorgan la identidad e imagen urbana/rural en cada caso. Con esto, el gran desafío fue el de generar un programa que consideró cambios estructurales importantes a nivel de políticas públicas, con el fin de potenciar el desarrollo económico y local de los pueblos afectados, y este tipo de obras que desarrollamos en Pumanque es un ejemplo de ello y del trabajo que el Minvu y Serviu ha llevado a cabo en la Región, recuperando las casas patrimoniales”.
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