Con una ceremonia de egreso se celebró el alta clínica de 15 jóvenes que estuvieron durante un año de tratamiento y rehabilitación de drogas y alcohol en el Programa Ambulatoria Intensivo del centro Layantú de la fundación León Bloy, que es financiado por CONACE.La actividad fue realizada en dependencias de la Fundación León Bloy y contó con la presencia de familiares y amigos de los jóvenes, también participaron en la jornada el director de la Fundación Leon Bloy Juan Alberto Rabah, la Secretaria Ejecutiva del CONACE, Francisca Florenzano, el Intendente Regional Patricio Rey Sommer, el coordinador regional de Conace, Felipe Leyton, la Seremi de Gobierno, Pamela Medina y el director de Sename, Francisco Moreno, entre otras autoridades.
Para el Coordinador Regional de CONACE, Felipe Leyton este egreso “es el logro de un trabajo conjunto entre las organizaciones públicas y los centro privados colaboradores, ongs y fundaciones, con el fin de ejecutar una política pública que promueva la rehabilitación y reinserción de aquellas personas que por sus condiciones sociales se han visto envueltos en el complejo fenómeno de la drogadicción.”
Carmen Gloria Ossandón, encargada del área técnica de Fundación León Bloy, señaló que "Nuestro rol en este proyecto fue brindar tratamiento de intervención altamente especializada. Una intromisión clínica enfocada a la rehabilitación de jóvenes infractores. Estos programas son ambulatorios e intensivos que requieren de una presencia permanente de los jóvenes. Venimos ejecutando como Fundación otro proyecto que se realiza en Graneros, llamado Pukem. Esta iniciativa ha tenido muy buenos resultados y que quisimos replicar en Rancagua, a través de Layantú, que surgió a partir de esta experiencia en el CIP-CRC de esta comuna".
Este grupo de jóvenes conformado por 11 hombres y 4 mujeres, con edades entre los 15 y 21 años, estuvieron en un proceso de tratamiento y rehabilitación que duró alrededor de un año, y que culminó de manera exitosa, gracias al esfuerzo y la fuerte convicción de estos jóvenes y el apoyo de sus familias.
Para Juan Alberto Rabah, presidente del directorio de Fundación León Bloy. "La Fundación tiene varios programas en la Región y este es uno de los más relevantes, debido a la satisfacción que implica para el equipo el ayudar a jóvenes infractores vulnerables. La drogadicción es un problema grave que trae como consecuencia la destrucción de la vida de las personas. Es por eso que quiero hacer hincapié en el esfuerzo que han hecho estos 15 jóvenes para salir de este flagelo tan destructivo. Este grupo de jóvenes que se ha rehabilitado hoy nos da más energía para seguir adelante con este proyecto. Creemos que un buen trabajo y un equipo comprometido es fundamental para el éxito en el desarrollo de este programa".
El proceso de alta clínica considera no sólo la remisión en la dependencia o consumo problemático de sustancias o alcohol, sino que también la interrupción de conductas de infracción de ley, reinserción laboral y/o escolar, mejoras en la condición de salud física y mental, así como el cumplimiento de sus respectivas sanciones penales.
Al respecto el Intendente Regional Patricio Rey Sommer señala “cuando somos capaces de que un joven vuelva a ser una persona productiva, que se quiera a si misma y logre sus sueños, simplemente es algo sumamente importante. Lo que queremos como gobierno es crear una sociedad de igualdad y oportunidades que los jóvenes y cada uno de nosotros logremos lo que queremos ser y cumplir nuestros objetivos”, destacó el Intendente.
Durante la ceremonia hubo entrega de diplomas y obsequios para los quince jóvenes egresado del programa, donde además se exhibió un video con testimonios e historias de vida, de los usuarios que han egresado del tratamiento de drogas y alcohol, como explicó Domingo de 21 años, y usuario del Programa Layantú “consumí droga desde los quince, ahora trabajo y hago artes marciales: siento alegría y tengo ánimo para salir adelante porque además logré recuperar a mi familia”.
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