Con buenos resultados se desarrolló durante 2011 el trabajo comunitario en Salud Mental, como una forma de entregar apoyo a los usuarios en esta área y promover estilos de vida más sanos en la Sexta Región.
Esta iniciativa, que forma parte del Programa de Salud Mental en la Atención Primaria del Servicio de Salud O´Higgins, se implementa en hospitales (como los de Graneros, Coinco, Nancagua, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Lolol, Litueche, Pichilemu y Marchigüe), Corporaciones Municipales de Salud, Cesfam, consultorios, postas rurales y centros comunitarios de toda la región.
Este plan de trabajo comunitario apunta a brindar asistencia y apoyo a agrupaciones de autoayuda; juntas de vecinos; clubes deportivos, de adultos mayores y de mujeres; organizaciones de padres, apoderados y profesores de establecimientos educacionales, en definitiva, a grupos que cuenten entre sus integrantes con niños, jóvenes y personas de la tercera edad, vulnerables a padecer algún trastorno emocional o psicológico.
Durante 2011 el objetivo principal del programa fue darle énfasis a la promoción de estilos de vida saludables en las personas, tanto en el ámbito físico como en el emocional, para evitar riesgos asociados al alcoholismo, al tabaco y a la obesidad, entre otras afecciones.
De esta manera, la labor realizada con los pacientes se basa en talleres grupales, charlas, actividades culturales y deportivas, mesas de trabajo, sesiones de sensibilización (a través de las cuales la persona le otorga un nuevo significado a las experiencias vividas), que están a cargo de equipos multidisciplinarios de profesionales.
En torno al desarrollo de esta iniciativa, Alberto Blest, asesor del Programa de Salud Mental del Servicio de Salud O´Higgins, comentó que “lo trascendental de estos proyectos es que permiten sensibilizar a la comunidad respecto a temas de un alto impacto social y, que tienen que ver, con el maltrato infantil, diversas adicciones y problemas que influyen en la calidad de vida de los pacientes”.
Asimismo, el profesional explicó que respecto al desarrollo de esta iniciativa y con la finalidad de potenciarla aún más, para este año se pretenden establecer acciones concretas y específicas, una supervisión técnica más acuciosa y reuniones de trabajo con los equipos de profesionales involucrados en los talleres, para mejorar la implementación del plan durante este ciclo.
Estos talleres también sumaron la aplicación de terapias alternativas como el Reiki, las flores de Bach, la Acupuntura y las camillas con mineral de Jade (las cuales son utilizadas para aliviar el dolor), que sirvieron de coadyuvantes a la medicina tradicional, teniendo muy buenos resultados en los pacientes.
Cabe destacar, que con este programa actualmente se está desarrollando un proyecto el cual está postulando para participar y ser expuesto como documento de trabajo en el V Congreso Panamericano de Salud Mental Infanto Juvenil, el cual se realizará en abril, en La Habana, Cuba.
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