En una asamblea realizada en el corazón de Villa Los Parques de Rancagua, los vecinos aprobaron la demolición de sus viviendas, concluyendo así un ciclo de pesar y desesperanza.
Optimismo. Es el mejor calificativo que define lo que sienten hoy los vecinos de villa Los Parques de Rancagua tras aprobar la demolición de sus viviendas. Un hecho que viene a colocar fin a años de sufrimientos y luchas por mejorar sus departamentos que fueron mal construidos y entregados así en el año 1997 generando como consecuencia una serie de problemas, que se agudizaron con el terremoto del 27 de febrero pasado. Falencias que al quedar al descubierto no hicieron más que aumentar el dramatismo para estas cientos de personas que allí habitaban.
En una asamblea convocada por SERVIU y ante la presencia del Seremi de Vivienda y Urbanismo, Ragnar Branth, el Director Regional de SERVIU, Fernando Fondón, abogados de este servicio y el notario Jaime Bernales, cerca de una veintena de vecinos tomaron esta difícil decisión pero esperada desde hace más de una década. Esto dará paso a la construcción de un nuevo complejo habitacional en el terreno del frente, de casas de un piso que los albergará.
“Fue una lucha larga de 13 años, donde luchamos fuertemente por los problemas que arrojó la mala construcción y hoy se hace justicia, justicia por esto que vivimos. Yo creo que se cierra una etapa y empieza un nuevo sueño, el de la casa propia”, señaló Patricia Díaz, presidenta de la Junta de Vecinos Los Parques, en medio de la contradicción que los envuelve en estos momentos. Pues por un lado existe tristeza por perder un lugar que los acogió por años pero por el otro hay esperanza en que ahora sí vivirán con dignidad.
Para Claudia Mendoza, secretaria de la junta vecinal “el terremoto que fue muy malo, a la vez, fue bueno para nosotros porque sirvió para que las autoridades se dieran cuenta de la mala construcción. Quedo muy conforme con esta resolución”.
Cabe mencionar que tras la catástrofe natural este conjunto fue declarado inhabitable en su totalidad debiendo trasladarse hasta la aldea San Antonio la mayoría de las familias afectadas. Por eso la demolición abre un camino sólo de esperanza que los llevará hacia su nueva casa.
“Debemos agradecer la participación de los vecinos y la confianza que han tenido en nosotros. Nuestro compromiso es con todos ellos, las cosas van por buen camino para lograr que pronto tengan su vivienda. La demolición debiera llevarse a cabo dentro de la semana para ya en noviembre comenzar con las obras. Esto sin duda es un hito dentro de nuestros avances en reconstrucción”, afirmó Ragnar Branth, Seremi de Vivienda y Urbanismo.
Comienza así, entonces, una nueva etapa para estos 200 vecinos damnificados que esperan con ansias volver a contar con su casa propia.
| < Prev | Próximo > |
|---|
