![](/images/fck/04/conducción con lluvia.jpg)
“Conservar la distancia prudente entre vehículo y vehículo, ya que al encontrarse en pavimento o calzada resbaladiza, al frenar los vehículos se desplazan mayores distancias, pudiendo producirse colisiones por alcance”, indicó el oficial, agregando que antes de iniciar la marcha es necesario siempre desempañar o limpiar los vidrios tanto parabrisas y luneta del vehículo, hasta tener plena visión, ya que por los cambios de temperaturas se genera vapor que impide la visión.
El Capitán Gerardo Henríquez Rojas, también señaló que durante estos eventos es más necesario que nunca “conducir atentos a las condiciones del tránsito y a velocidad reducida, ya que por la posible acumulación de agua en las vías se puede generar hidroplaneo (cuando los neumáticos de un vehículo pierden contacto con el pavimento por una película de agua y por consiguiente disminuye o se elimina el poder de adherencia de las ruedas) o también provocar lanzamiento de agua a peatones”.
Conduzca a velocidad reducida y mantenga una mayor distancia del vehículo que le antecede.
Antes de llegar a las intersecciones, es práctico tocar el pedal del freno para estar seguros de su efectividad y tener suficiente espacio para reaccionar en caso de sentir deficiencias.
Verifique que las gomas de los limpiaparabrisas no estén gastadas o quebradizas por efecto del sol.
Recuerde que la distancia de frenado casi se duplica en el pavimento mojado.
Conduzca atento a las condiciones del tránsito.
Donde haya peatones, circule a velocidad reducida.
Evite circular por grandes acumulaciones de agua. Si le es extremadamente necesario, hágalo a baja velocidad.
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