La medida se adoptó mientras se efectúa la indagatoria interna a raíz del envío del cuerpo de una menor de tres años, que falleció en tsunami en Pichilemu, en una caja en un bus.
Familia Carey Morning envía carta de agradecimiento
Suspendidos de sus funciones quedaron este miércoles el jefe del Servicio Médico Legal (SML) de la Región de O´Higgins y el tanatólogo de ese organismo, en el marco del sumario administrativo que busca establecer las razones que hubo para enviar en bus, vía encomienda, desde Rancagua a la capital los restos óseos pertenecientes a la pequeña Juana Rafaela Carey Moring, de 3 años, encontrados hace una semana en Pichilemu.
Según indicaron fuentes vinculadas al caso, la medida disciplinaria se adoptó mientras se efectúa la indagatoria interna.
El director nacional del SML, Patricio Bustos, anunció ayer que desde el 27 de febrero, tras el terremoto y tsunami ocurridos en la zona central, se instaló una red forense para la tarea identificación de los cadáveres.
Es en ese contexto que, hoy al tener conocimiento del despacho de los restos de la menor, se resolvió la realización de "un sumario administrativo para analizar todo el procedimiento a fin de determinar si hubo alguna falta o irregularidad".
Recalcó que el SML nombró al abogado de la institución, Hernán Rojas, para que viaje de inmediato a Rancagua con la finalidad de recopilar todos los antecedentes sobre el traslado del los restos de la pequeña.
La niña había desaparecido junto a su hermano León, de un año, la madrugada del 27 de febrero, tras el terremoto y maremoto. Ellos se encontraban juanto a su familia en la playa de Tanumé, a 20 kilómetros de Pichilemu.
Esta mañana, en tanto, los restos de Juanita Carey fueron incinerados en el Cementerio Parque del Recuerdo.
CUERPO ESTUVO TRES DÍAS EN UNA BODEGA
Además, los funcionarios del SML denunciaron que la encomienda que contenía los restos de la menor pasó tres noches (viernes y fin de semana) en la bodega de la empresa Pullman Cargo antes de que llegaran a la capital el lunes 29 de marzo.
El gerente de Asuntos Públicos de dicha emprea, José Silva, afirmó que el SML no les informó del contenido de la caja ni hicieron una declaración de ello, a diferencia de lo que ocurría en otras oportunidades.
“Era una caja común y corriente, lo único que decía era ´frágil´. Si se nos hubiera informado, hubiéramos dispuesto de un traslado especial para hacer una entrega más rápida, por el tema humano, por el dolor que estaba pasando la familia” dijo.
Los trabajadores del SML, representados por José Morales, aseguraron que el director regional del organismo en Rancagua, el siquiatra Juan Díaz, dio la orden de enviar por encomienda los restos aplicando bajo su criterio un procedimiento permitido para osamentas de detenidos desaparecidos.
“(Pero) éstas no eran osamentas, era un cuerpo encontrado. Lo ético era que se transportara a la niña en un vehículo del Médico Legal, y si no hay autos, se llama a Santiago y se envía un automóvil desde acá. Se ha hecho otras veces”, señaló el vocero de los funcionarios.
Fuente: Terra.cl/UPI
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