Un cirujano, una nutricionista, dos médicos generales y cuatro enfermeras llegaron durante este mañana a Rancagua a ponerse a disposición del Servicio de Salud O’Higgins para ayudar a las víctimas del terremoto que se encuentran internadas en los diferentes establecimientos asistenciales de la región.
Los ocho profesionales jóvenes, que provienes de distintos puntos del país, se sumaron al llamado realizado por el Ministerio de Salud de colaborar voluntariamente en los lugares más perjudicados por el gran sismo acontecido el pasado sábado 27 de febrero.