Llegar a la mitad de año cansado puede perjudicar el cumplimiento laboral, así lo explica Lorena Baus, subdirectora de la Escuela de Negocios de AIEP, quien señala que “en la medida que avanza el año, comienza a generarse la acumulación de cansancio físico y mental que sumados al ritmo colectivo pueden afectar considerablemente el desempeño, sobre todo cuando no se ha podido tomar un descanso en invierno”.
Como gran parte de las personas pasa de largo hasta las vacaciones de verano la especialista de AIEP considera que “es importante entonces aprovechemos los fines de semana para hacerlo de manera de no sobre explotar nuestro organismo y llegar en buenas condiciones a disfrutar de unas merecida vacaciones”.
En esa misma línea Mario Tricado, subgerente de recursos humanos de Kibernum, señala que lo recomendable para reactivas las energías “es orientar, permitir y promover actitudes y actividades que nos ayuden comprender que somos personas, seres humanos que necesitamos hacer ciertos quiebres en la rutina diaria para mejorar nuestra salud física y mental”.
Recomendaciones para los trabajadores
Gran parte de la responsabilidad de comenzar y terminar el segundo semestre con la motivación en alto es de los mismos trabajadores, son ellos los que deben buscar y crearse las instancias para el esparcimiento y planificar todos los eventos de fin de año para no terminar colapsado, pues eso puede repercutir en el ánimo y el nivel de agotamiento. “Es importante también darse pausas y aprovechar muy bien los tiempos libres, disfrutar y relajarse. Debemos vivir el día y no estresarnos pensando en lo que se viene por delante o el tiempo que falta aún para tomarse el merecido descanso”, subraya Baus.
Por su parte Trincado señala que es importante “hacer deporte y compartir con los amigos también es una forma de descansar. De igual relevancia es también permitirse tener ciclos de sueño sistemático de ocho horas diarias. En general cuando las personas están cansadas optan por ver TV o quedarse en casa, pero resulta mucho más beneficioso realizar actividades que nos saquen de la rutina”.
Qué pueden hacer las empresas
Los empleadores también tienen un deber con la renovación de las energías de sus trabajadores, pues finalmente un personal agotado influirá directamente en la producción y calidad del trabajo entregado por la empresa. Es por eso que lo ideal es que dentro de la institución se promuevan las actividades y se incentive a tomar descansos a mitad de año.
“Las empresas también podemos colaborar con nuestras personas a través de realzar los beneficios, promover los convenios con gimnasios y centros de recreación, el desarrollo de actividades como la gimnasia de pausa o talleres deportivos o de otra índole”, destaca el ejecutivo de Kibermun.
Para Baus la clave está en que “se generen reuniones informales al interior de la empresa que permitan al personal aportar ideas enfocadas en la mejora de productividad y éxito de la organización. La idea es que ellos sientan que la empresa los considera y toma en cuenta sus aportes, respetando sus opiniones y fomentando su identificación con la organización. Apoyar a los empleados escuchándolos y apoyándolos para que puedan lograr todos los objetivos que se han planteado para el año. Dado que les resta sólo la mitad del tiempo, se puede apoyar bastante retroalimentando o bien redireccionando algunas estrategias que contribuyan al logro de las metas”.
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