La decisión de seguir potenciando el negocio ovino en el secano, impulsando una mayor productividad, y específicamente llevando la producción a un doble propósito, y rescatando la lana como un segundo producto relevante, fueron algunas de las conclusiones del Coloquio Ovino realizado en Marchigue a la hora de analizar la viabilidad de este rubro.
En este encuentro participaron productores grandes y pequeños, los industriales, el consorcio ovino, las agencias de desarrollo como FIA e Innova Corfo, más INDAP O’Higgins e INIA, quienes debatieron un estudio de evaluación económica hecha por Claudio Aguilar, profesor de Agronomía de la Universidad Católica, que analizó qué tan rentable era para los pequeños, medianos y grandes productores de la VI Región invertir para obtener carne de calidad exportable a la Unión Europea.La conclusión es que sí hay posibilidades para que el rubro siga desarrollándose en la zona de secano, si se complementa la producción básicamente con lana y siguen mejorándose parámetros productivos como las praderas, el manejo y trabajando fuerte en transferencia tecnológica para obtener más rendimiento. “Hay demanda por carne ovina y la industria dice que todo lo que se le entregue es capaz de exportarlo", señala Rodrigo Vega, director de FIA, organizador del encuentro.
Se constata que en los últimos años la industria faenadora ha experimentado un importante crecimiento, realizando millonarias inversiones con miras al mercado internacional que presenta una alta demanda de carne ovina, lo que abre interesantes perspectivas para los productores ganaderos de la zona, quienes eso sí deben adecuarse a los requerimientos y exigencias de este mercado para la obtención de ganado de calidad.
En este sentido, argumentó el Director Regional de INDAP O’Higgins, Eduardo Fraser, la entidad que dirige a través de su política de fomento productivo, ha desplegado un programa de apoyo sistemático en los últimos años, que forma parte de sus lineamientos estratégicos, fomentando el mejoramiento genético en ovinos hacia raza de carne e híbridos, incentivando el establecimiento de praderas anuales y la implementación de las Buenas Prácticas Ganaderas, desarrollando capacidades de gestión en ámbitos productivos y empresariales para mejorar la competitividad del sector de la Agricultura Familiar Campesina.
Añadió que este apoyo se contextualiza en sectores del secano deprimidos económicamente, por cuya razón los logros en materia productiva y de negocios apuntan a mejorar la condición socioeconómica de los productores, cumpliendo de paso con el compromiso presidencial de respaldar a los campesinos, de invertir en la gente para que mejore su calidad de vida y se facilite su permanencia en el campo mediante el acceso a oportunidades de negocios en las condiciones en que los mercados lo exigen hoy.
El rubrista del INDAP O’Higgins, José Manuel Mancisidor, manifestó que a través de su Servicio de Asesoría Técnica y programa Prodesal, el INDAP está impulsando la tecnificación de la producción ovina, dotando a estos programas de equipos técnicos especializados (médicos veterinarios acreditados) para atender un programa intensivo de capacitación y asesoría técnica predial, mejoramiento a la calidad y en la cantidad de corderos de los pequeños productores, propiciando acciones que están orientadas al logro de resultados productivos como en la alimentación del ganado ovino, su manejo, sanidad, dotación de infraestructura y control de gestión.
El INDAP se encuentra fortaleciendo la Red Regional de Productores Ovinos del Secano, y aspira al desarrollo de la marca regional “Cordero del Secano”, tarea que le corresponde a la Mesa Regional Ovina. Además impulsa el Programa de Alianzas Productivas con industrias como Carnes Ñuble, aumentando los resultados comerciales de los ganaderos campesinos que están cifrados en la exportación de carne de cordero de calidad y que cuenta con asesorías técnicas especializadas para el logro de estos objetivos.
En alianza con el SAG el INDAP propicia la certificación Pabco en ovinos para que los ejemplares estén aptos para su exportación a la Unión Europea, así como ha financiado estudios sobre Brucelosis Ovina y Maedi Visna; con el SENCE respalda la profesionalización campesina a través de cursos de alfabetización digital, manejo y gestión predial ovina; y con el INIA apoya capacitaciones, días de campo, compra de reproductores y de semillas para el establecimiento de praderas.
Para apoyar el mejoramiento genético el INDAP mantiene una alianza productiva con el Consorcio Ovino que tiene como objeto el desarrollo y fortalecimiento del Centro Genético Ovino de Marchigue, a través de la entrega de carnerillos y borregas probadamente mejores a los productores que son usuarios del INDAP, y a partir de este año para el manejo reproductivo se ha incorporado tecnología a través del uso de un scanner ovino en el marco del Servicio de Asesoría Técnica predial que entrega el INDAP en la zona.
A través de sus programas de asistencia técnica el Ministerio de Agricultura, mediante INDAP, apoya en esta zona a 763 pequeños productores ovinos, quienes manejan preferentemente las razas de cara negra.
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