Más de 16 mil millones de pesos ha invertido el Estado en el control de esta plaga, detectada en la región Metropolitana en abril del 2009, y que afecta el rendimiento de los parrones si no se controla. Este jueves se dio inicio en Requínoa a la fase de control químico en áreas urbanas de la región. A esta comuna se suma Mostazal, San Fernando y Chimbarongo, donde se replicarán las aplicaciones.